Erase una vez unos niños que vivían en Jaén, uno se llamaba Jaime y la niña Paula. Era el día 31 de diciembre, se comieron las uvas en la casa de sus abuelos con toda la familia, el día 1 de enero
le escribieron la carta a los Reyes magos. Jaime le pidió un coche de carreras y Paula le pidió una muñeca. Pasaron los días y llegó el día 5 de enero, le pusieron a los Reyes magos tres vasos de leche (uno para cada uno) y seis galletas (dos para cada uno) y a los camellos pienso y agua.
Jaime y Paula pusieron sus calcetines en la chimenea para que se los llenaran de caramelos y gominolas. Los niños se acostaron temprano, cada uno en su cama, a la mañana siguiente se despertaron. No pudieron ver los juguetes porque se tenian que ir a la escuela rápidamente, en la clase la maestra le pregunto que le habian regalado pero Jaime y Paula no pudieron decir nada.
La maestra dijo que se trajeran los regalos a la clase para verlos, Jaime y Paula se llevaron los regalos a la clase y si no le gustaban los regalos que se los intercambiaran a sus compañeros/as a Jaime y a Paula les pareció bien. Al día siguiente se llevaron los juguetes para intercambiarlos Jaime se lo intercambió a Manuela que le gustaba los coches por una muñeca que también les gustaban las muñecas, Paula se lo cambió a Pepe por una moto y Pepe se llevó la muñeca de Paula. Los dos hermanos fueron muy felices con sus regalos los otros niños fueron muy felices al intercambiarse uno al otro los juguetes.
Y colorin colorado este cuento de igualdad se ha terminado. Opiniones: Da igual que juegen los niños con los jueguetes de las niña y las niñas con los de los niños.
Jaime y Paula 5ª curso Ermita Nueva